Día

 

“Liberándonos del temor a través de la oración”

 

“Escúchame cuando oro, oh Señor; ¡ten misericordia y respóndeme!
 Mi corazón te ha oído decir: «Ven y conversa conmigo».
 Y mi corazón responde: «Aquí vengo, Señor»”

Salmos 27:7-8 (NTV)

 

 

Muchas veces nos llenamos de miedo o angustia al escuchar noticias o ver lo que está pasando a nuestro alrededor, especialmente hoy en día. En ocasiones dejamos de dormir por estar preocupados por cosas que están fuera de nuestro control, a pesar de que la Biblia nos dice que no debemos de preocuparnos, ya que cada día trae su propio afán. (Mateo 6:34). 

 

Me encanta ver la confianza y sencillez con la que el rey David se acercaba a hablar con Dios y exponía todos sus temores. Dios nos invita a buscarle todos los días y no espera que lleguemos con palabras rebuscadas. De hecho, Dios quiere que lleguemos ante Él con un corazón sincero y expongamos todas nuestras preocupaciones, así como nuestros agradecimientos. 

 

El rey David es conocido como un gran guerrero diestro en utilizar muchas armas. El arma principal que él utilizo para enfrentar la ansiedad fue la oración. En medio de su ansiedad oró a Dios y “Dios lo escuchó y lo libró de todos sus temores” (Salmos 34:4).

   

Una de nuestras mayores armas es la oración, busquemos a Dios en todo momento y recordemos que:

  • El Señor es nuestra luz – en medio de los momentos obscuros 
  • El Señor es nuestra salvación – en medio de cualquier peligro. 
  • El Señor es nuestra fortaleza – en medio de cualquier dificultad. 

(Salmos 27:1)

 

 

Raquel Villatoro.